Santurtziarra de origen, aunque domiciliado en Gasteiz hace más de 30 años, Bittor Requejo Agirre llega a la pintura desde la fotografía de paisaje, una afición que le ha acompañado durante años en sus viajes y excursiones. No es de extrañar, por tanto, que sus obras estén basadas en fotografías.

De formación autodidacta, inicia su andadura en el arte de la pintura en la primavera del año 2012.

Utiliza pintura acrílica, bien sobre lienzo o sobre tabla, y lo hace principalmente porque los colores que genera son luminosos y muy limpios, adaptándose perfectamente a la idea de color que pretende plasmar en sus obras.